viernes, 21 de diciembre de 2012

R. Sociedad: 2 - SFC:1: Pesadilla en la cocina sevillista.

Diez de la noche de un jueves, un horario difícil para las televisiones que ayer tuvieron que compartir sus programas contra una jornada de liga en la que jugaba nuestro Sevilla FC en Anoeta para finalizar el año 2012. Así que entre otros, se podía elegir Marca TV con los interesantes comentarios del señor Andújar y el comentarista de rigor que no se le cae de la boca aquello del “equipo de Michel” porque le debe de dar rabia decir Sevilla F.C. o programas de moda como “Pesadilla en la cocina” y creemos que en el fondo haría falta un cocinero como Chicote para arreglar la pesadilla en la cocina sevillista que vimos ayer.

Porque en este programa que visita restaurantes con problemas para reflotarlo cambiando los malos hábitos y poniendo nuevas cartas y mejorando los locales debería repetirse en el Sevilla FC, viniendo por ejemplo un especialista como Guardiola y que mirara los problemas que puede hacer que la empresa que es el Sevilla F.C. esté en sus momentos más bajos de este siglo.

Y es que en el programa de cocina se suele ver que los problemas están en la cocina bien porque los cocineros o no saben o no quieren o no pueden preparar platos que les gusten a los clientes. En este caso nuestros cocineros están dirigidos por el chef Michel que creemos que quiere pero que no acierta con sus decisiones como por ejemplo mantenerse en sus treces de darle la portería a un Diego López fallón o el lateral a un Coke que está varios escalones por debajo de Cicinho y que encima vuelve a provocar otra expulsión en una jugada tonta cuando sabía que tenía una amarilla.

Además en el programa de cocina se suele ver que los camareros no están coordinados y que su relación con los cocineros no es la adecuada, esperemos que no pase eso entre los futbolistas (nuestros camareros) y el chef (Michel) pero en esto del fútbol hay muchas falsedades y todos defienden al entrenador hasta que lo despiden y luego empiezan a ganar los equipos como último ejemplo el milagro de Aguirre que no ha perdido aún al coger al que era colista.

Y lo último que suele ocurrir es que el dueño del restaurante o no sabe o no tiene interés por su negocio y en nuestro caso nuestro dueño (Del Nido) estamos seguros que sabe y tiene interés pero tiene demasiados problemas personales y se abre campos de disputa sin sentido como el enfrentamiento con los Biris o la disputa contra la liga, esa que manda a sus árbitros para que se equivoquen casi siempre en contra del Sevilla FC.

Y lo malo que no va a haber programa en navidades, no se va reformar el restaurante (no se van a fichar nuevos jugadores y a lo mejor no se venden los que están). Ni va a venir un especialista a mejorar los hábitos del equipo técnico y los jugadores. Porque lo normal es que se termine echando al entrenador porque con 19 puntos tras 17 partidos no se cumplen objetivos y hay que plantearse que hay que luchar solo por conseguir 45 puntos y mantenerse en primera.

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