Sevilla FC 1 - RMA: 0 : Incluso con la victoria es una liga injusta

Celebración de la victoria con la afición en el centro del campo

 Alegría con mayúsculas la que nos dio ayer el Sevilla F.C. ganándole a un Real Madrid que fue una sombra en el Sánchez-Pizjuán gracias a un buen trabajo de los jugadores sevillistas que hicieron lo que había faltado en los últimos partidos contra ese equipo, gran actitud y concentración al 100% no dejando respirar a los rivales que cuando se sienten incomodos no tienen otra salida que la de protestar de forma aireada y dar patadas y codazos con la permisividad de los árbitros, esta vez le tocó a Undiano favorecer a un equipo que debía haber terminado con 3 jugadores menos, porque las acciones citadas si las hubieran hecho algún sevillista habría visto la roja directa sin contemplación.

Yendo por partes, al final Michel cambió el esquema respecto a lo que se comentaba de poner a Luna de extremo izquierda, apostando por Maduro en el centro y Trochowski en la banda resultando un éxito ya que el holandés, aunque se ve que no está en una gran forma física, demostró una gran claridad de ideas estando en la zona central en los momentos necesarios tanto para cortar como para mover la pelota. Además esto permitió adelantar a Medel y con ello la línea de presión estuvo más arriba no dejando jugar a los centrocampistas del Madrid.

La otra duda era en la portería en la que parece que Palop ha conseguido la titularidad, más tras el gran partido que dio ayer con varias paradas de mérito.

El equipo salió volcado y en el primer minuto hubo un tiro que Casillas no blocó y Negredo estuvo apunto de marcar terminando la jugada en córner que sacó Rakitic al centro del área a donde llegó desde atrás Trochowski para rematar cercano a la escuadra consiguiendo el gol que sería el de la victoria, aunque aguantar 93 minutos (incluyendo los descuentos) al Madrid no es tarea fácil.

Para ello hay que poner muchas ganas y estar muy atentos y en esto hay que poner un 10 a los sevillistas que ayer estuvieron en el césped y a casi todos los que estuvieron en la grada, seguimos sin entender la postura de algunos de los socios de gol norte que asisten a los partidos y no animan cuando lo primero para todos es apoyar al equipo para conseguir victorias como las de ayer, y para protestar hay muchas formas sin que para ello lo noten los jugadores.

De hecho desde el césped se buscaba el apoyo de la grada, que lo tuvo desde todos los sectores, con imágenes como las de Cicinho o Negredo levantando las manos para buscar más apoyo de la afición, así como por los comentarios que han realizado a través de las redes sociales.

Y durante el partido se sufrió porque cualquiera de los que ayer vestía un verde negruzco, por lo que nos alegra más la victoria para los de marketing se vayan con la cabeza baja por su genialidad de vestir de esa forma para recordar al otro equipo de la ciudad, y hubo jugadas que pudieron costar el empate destacando una falta de Cristiano que Palop sacó a córner, un tiro de Modric que despejó Palop tocando el palo y un cabezazo de Sergio Ramos solo que salió por encima del larguero, jugadas en que hubo acierto y algo de suerte que siempre es necesaria.

Pero el Sevilla F.C. también tuvo oportunidades muchas al contragolpe con una banda derecha con Cicinho cada día más acoplado a Navas que hace soñar con la que se tuvo hace años con Dani Alves. Pero no hubo claridad para marcar el segundo que hubiera dado más tranquilidad.

Terminar destacando la ayuda que recibió el Madrid por parte de Undiano porque Higuain debió ser expulsado por tirarle una patada a Fernando Navarro (que debió tirarse como hacen los de Madrid fulminados ya que si te quedas de pie los árbitros no quieren ver las agresiones) y un codazo de Di Maria, que ya tenía tarjeta amarilla, a Rakitic que terminó con tarjeta para el sevillista seguramente por dejarse dar el codazo, así como un Pepe que como siempre hizo entradas para ser expulsado varias veces y además protestó como quiso y cuando quiso, pero esta es la liga que tenemos injusta en todos los sentidos e incluso cuando se le gana a los galácticos.