En los tres partidos de la próxima semana se juega el Sevilla F.C. el salvar una temporada que hasta ahora solo se puede calificar de mediocre y, en términos académicos, en principio con los exámenes parciales suspendidos por ellos se debe entender los partidos ante el Real Madrid, el otro equipo de la ciudad, y el Rayo Vallecano como unos exámenes finales y en última convocatoria es decir se juega el rodo por el todo para conseguir un aprobado raspón que siendo realistas supondría una clasificación para la Europa League.
Y es que hasta esta jornada 34 de liga los números que presenta el Sevilla F.C. son los siguientes, en liga un octavo puesto con 46 puntos a 6 del cuarto puesto y 1 punto de Europa League, gracias a que el Athletic de Bilbao ya está clasificado, pero con cuatro puntos de diferencia con el 13º. El año pasado estaba 5º con 52 puntos a 8 del cuarto y con 1 punto de diferencia del 7º.
Si se compara entre los dos entrenadores de esta temporada los números de Michel son realmente mejores que los de Marcelino, lo que no quiere decir que permitan sacar conclusiones porque lo que valdrá es la clasificación al final de temporada, aunque ahora mismo no solo la estadística da la razón al madrileño, también la da el sentido común en su forma de manejar el equipo, la prensa y porque no decirlo a la afición. Y no podemos olvidar que se ha encontrado con una herencia en el vestuario marcada por Marcelino y con una lista de lesionados entre los que destacan jugadores como Kanouté, Perotti o Escudé que se pueden entender como titulares.
Si se compara los números con otras temporadas el porcentaje de puntos de Michel es mejor peor que los de Jiménez y Manzano aunque la cantidad de goles ha favor y en contra tiene un equilibrio mejor que la de Manzano, pese a los problemas en la delantera que hemos dicho.
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